parece que de pronto todo cobrara vida.
Empieza con el cielo poniéndose plomizo,
una briza muy suave que aumenta lentamente.
El viento con su fuerza va despertando todo.
El día se oscurece, las ramas que se mecen
como péndulos rotos, giran enloquecidas
para un lado y el otro.
Y de pronto los rayos iluminan el dia
seguido por los truenos que lo estrecen todo .
Después llega la lluvia, primero calmamente,
y luego, poco a poco, cae como cascadas
de arriba de los techos varnizandolo todo.
No hay nada comparable a un dia de tormenta,
a eso yo le llamo naturaleza viva.
Virginia Pollero
Virginia Pollero
